lunes, 4 de febrero de 2013

En todo ser humano hay algo de egoísmo, por mucho que una persona quiera ayudar a los demás siempre terminará mirando por ella misma. Quieras o no eres tú, y solo tú, quién termina superando los problemas. Soledad es quién siempre te acompaña. La sensación de no encajar en un lugar o de sobrar ahí, la sensación de que si desapareces tu ausencia no se nota; esa sensación tan repetitiva.. Estás solo. ¿Suena triste, duro quizá? Puede, pero para cambiar mis pensamientos necesitaría que alguien, quién sea, me demuestre lo contrario y dudo mucho que eso pase; alguien que de verdad se preocupe por lo que ocurre en mi mundo sin un interés detrás de ello, alguien que realmente me valore sin esperar más de mi de lo que realmente puedo ofrecerle; alguien que, por ahora, no es nadie. No escribo sobre amor, no escribo sobre amigos; escribo sobre personas, personas que en ésta sociedad están muy bien escondidas entre un montón de gente. ¿Cuando mucha gente dejará de ser superficial, materialista, interesada... y se convertirán en personas con corazón?

No hay comentarios:

Publicar un comentario