domingo, 13 de julio de 2014

¿Qué se debe hacer cuando las ganas de desaparecer y empezar de cero lejos son superiores a tus ganas de seguir e intentar arreglarlo todo? Cuando sientes que pocas cosas te atan a tu presente es cuando realmente todo lo que intentas hacer bien deja de tener sentido.

Has tenido tus momentos felices pero, o te los han robado sin motivo, o se han terminado para siempre. Has dado importancia a personas a las que no les has importado ni la mitad que ellos a ti. Has valorado lo que has tenido y aún así lo has acabado perdiendo. Has luchado por cosas posibles haciendo de ellas imposibles inalcanzables. Has visto como la persona a la que querías te borraba de su vida sin más. Has visto como la vida se cargaba a putadas a personas cercanas. Has tragado lágrimas para no preocupar a nadie. Has pedido ayuda a gritos y has intentado ser fuerte hasta llegar al punto de quedarte en el intento.

Una vez te sientes tan solo es cuando el seguir con lo de siempre no tiene sentido. Las fuerzas para seguir están al límite de quedar agotadas; no hay ganas de fingir ni una sonrisa más, ni de aguantar un dolor más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario