Hay momentos en que los humanos me dan asco, y no me excluyo. Para cada uno de nosotros la culpa siempre es de otros, nunca será de uno mismo porque claro... uno mismo lo hace todo bien y nunca se equivoca. Y ya para terminar... juzgar a alguien por su apariencia, eso ya es una de las cosas más desagradables que podemos hacer, quizá esa persona que has puesto verde con una simple ojeada es la persona más maravillosa del mundo.
Estamos cargados de tonterías; nos creemos perfectos y, en la vida, se vive de juntar cosas imperfectas para crear una falsa perfección, ya que nada es perfecto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario